Compota de Avena y Frutas
La compota de avena y frutas es un postre casero delicioso y saludable, perfecto para disfrutar en cualquier ocasión. Esta receta combina el sabor dulce de las frutas de temporada, como las frambuesas, con la textura suave y reconfortante de la avena. La compota es fácil de preparar, solo requiere unos pocos ingredientes básicos, y es ideal para quienes desean una opción de postre más ligera. Además, es una excelente manera de aprovechar las frutas frescas que tengas a mano, convirtiéndolas en un manjar que puede conservarse por más tiempo. El jarabe que acompaña la compota agrega un toque extra de dulzura y sabor, haciendo que cada cucharada sea una experiencia deliciosa. También, esta receta es versátil y puede adaptarse según las frutas disponibles o las preferencias personales. Siguiendo las instrucciones paso a paso, lograrás un postre que seguramente encantará a todos. No dudes en experimentar con especias o acompañamientos para personalizar aún más tu compota de avena. Al prepararlo, no solo cuidas de tu salud, sino que también disfrutas de un momento de verdadera indulgencia.
Ingredientes
Ingredientes principales:
- Frambuesas limpias
Para el jarabe:
- 1 litro de agua
- 400-500 g de azúcar
Tiempo de preparación:
- 30 minutos incluyendo tiempo de cocción.
Instrucciones paso a paso
- Lava y limpia las frambuesas retirando cualquier impureza.
- Prepara el jarabe llevando a ebullición 1 litro de agua con el azúcar. Remueve hasta que el azúcar se disuelva completamente.
- Coloca las frambuesas en frascos de vidrio esterilizados.
- Vierte el jarabe caliente sobre las frambuesas, cubriéndolas por completo.
- Coloca las tapas en los frascos sin cerrar completamente.
- Pasteriza los frascos en agua caliente a 90 °C durante 15 minutos. Este paso es crucial para la conservación de la compota.
- Cierra bien los frascos una vez pasterizados, asegurándote de que las tapas estén bien selladas.
- Deja enfriar los frascos a temperatura ambiente antes de almacenarlos.
- Almacena en un lugar fresco y seco, preferiblemente en la despensa, para alargar la vida útil de la compota.
- Disfruta la compota ausente de conservantes, perfecta para servir con yogur o sobre tostadas.
- Si decides añadir avena para un toque nutricional, cocínala previamente y mézclala suavemente antes de verter el jarabe.
- Añade canela o vainilla en el jarabe para un aroma extra y un sabor más profundo.
- Asegúrate de que los frascos están bien cerrados para evitar que entre aire, que puede afectar la calidad.
- Usa frambuesas frescas y de temporada para lograr un sabor óptimo y colores vibrantes.
- Puedes probar la compota fría o caliente, según tus preferencias personales.
- Evita sobrecocinar las frambuesas, ya que podrías perder su forma y textura al hervir demasiado tiempo.
- Etiqueta los frascos con la fecha de preparación para llevar un control de su frescura.
- Si lo prefieres menos dulce, reduce la cantidad de azúcar a 300 g.
- Para un jarabe más denso, deja que el agua se evapore más tiempo sin las frambuesas.
- Experimenta con otras frutas como duraznos, fresas o arándanos para obtener variaciones de sabor.
Consejos
- Usa frascos de vidrio esterilizados para asegurar la conservación adecuada.
- Prueba adicionar especias como clavo o cardamomo para diferentes matices de sabor.
- Utiliza azúcar morena para un sabor más cálido y caramelizado.
Información nutricional
- Calorías: Aproximadamente 80 por porción.
- Proteínas: 0 g.
- Grasas: 0 g.
- Carbohidratos: 20 g.
Variaciones
- Compota con stevia: Sustituye azúcar por stevia para una versión baja en calorías.
- Frutas mixtas: Añade otras frutas como peras o manzanas para más variedad.
- Sin azúcar: Utiliza jugo de frutas naturales para endulzar de manera natural.
Sugerencias de presentación
- Servir frío sobre helado de vainilla.
- Acompañar con yogur natural para un desayuno saludable.
- Usar como relleno en tartas y pasteles para un giro dulce.
Los mejores lugares
- The Breakfast Club - Un lugar acogedor para disfrutar de buenos desayunos y postres. Ubicación: 33 D'Arblay St, Soho, Londres, Reino Unido.
- Pastelería Escribà - Famosa por sus dulces creativos y compotas. Ubicación: Gran Via de les Corts Catalanes, 546, Barcelona, España.
- Café Louvre - Perfecto para disfrutar de un postre con historia. Ubicación: Národní 22, Praga, República Checa.
- Café Savoy - Un clásico con excelentes pasteles. Ubicación: Vítězná 5, Praga, República Checa.
- Café Sacher - Conocido por su tarta Sacher y otras delicias. Ubicación: Philharmonikerstrasse 4, Viena, Austria.
- Ladurée - Famoso por sus macarons y delicados postres. Ubicación: 75 Av. des Champs-Élysées, París, Francia.
- Demel - Un sitio histórico para probar la cocina vienesa dulce. Ubicación: Kohlmarkt 14, Viena, Austria.
- Gerbeaud - Una de las confiterías más antiguas de Europa, ideal para amantes de lo dulce. Ubicación: Vörösmarty tér 7-8, Budapest, Hungría.
- Café Central - Un icono vienés con un ambiente único. Ubicación: Herrengasse 14, Viena, Austria.
- Angelina - Conocido por su chocolate caliente y postres maravillosos. Ubicación: 226 Rue de Rivoli, París, Francia.